1 de noviembre de 2016

CUARTA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL, TECNOLOGÍAS E IMPACTOS

Silvia Ribeiro. alainet.org

Según los más ricos y poderosos del planeta, la cuarta revolución industrial ya está en marcha y es resultado de la convergencia de robótica, nanotecnología, biotecnología, tecnologías de información y comunicación, inteligencia artificial y otras. El Foro Económico Mundial, que reúne cada año en Davos a las mayores empresas del planeta, produjo en 2016 un informe donde afirma que con la “tormenta perfecta” de cambios tecnológicos junto a lo que llaman asépticamente “factores socio-económicos”, al 2020 se perderán 5 millones de empleos, incluso contando los nuevos que se crearán por las mismas razones.

Si ellos hablan de una pérdida de 5 millones de empleos, seguramente serán muchos más. Y es sólo uno de los impactos de esta revolución tecnológica, que no se define por cada una de estas tecnologías aisladamente, sino por la convergencia y sinergia entre ellas. Nombran entre las diez tecnologías claves –y más disruptivas- la ingeniería de sistemas metabólicos para producir sustancias industriales (léase biología sintética para remplazar combustibles, plásticos, fragancias, saborizantes, principios activos farmacéuticos derivados de conocimiento indígena); el internet de las nano-cosas (además de usar internet para producción industrial, agrícola, etc., también nano-sensores insertados en seres vivos, incluso nuestros cuerpos, para captar y recibir estímulos y administración de drogas y farmacéuticos); ecosistemas abiertos de inteligencia artificial (integrar máquinas con inteligencia artificial al internet de las cosas, a las redes sociales y a la programación abierta, con potencial de cambiar radicalmente nuestra relación con las máquinas y entre éstas mismas) y varias otras, como nuevos materiales para almacenar energía, nano-materiales “bidimensionales”, vehículos autónomos y no tripulados (drones de todo tipo con mayor autonomía), optogenética (células vivas manipuladas genéticamente que responden a ondas de luz), producir órganos humanos en chips electrónicos.

En el año 2000, desde el Grupo ETC llamamos a esta convergencia BANG (Bits, Átomos, Neurociencias, Genes), un especie de Big Bang tecno-socio-económico, mejor llamado “Little Bang” porque las tecnologías a nano-escala (aplicadas a seres vivos y materiales) son la plataforma de desarrollo de todas las otras. Avizoramos entonces que este “Little Bang”, estaba formando un tsunami tecnológico que tendría impactos negativos de grandes dimensiones en medio ambiente, salud, trabajo, en producción de nuevas armas para guerra, vigilancia y control social de todas y todos, entre otras. Todo en un contexto de la mayor concentración corporativa de la era industrial, oligopolios con cada vez menos empresas que controlan inmensos sectores de producción y tecnologías.

Así está sucediendo, pero para cada uno de nosotros separadamente es difícil percibirlo en totalidad y en las dimensiones de sus impactos que se complementan. Los gobiernos, mayormente controlados por intereses corporativos y con el mito de que los avances tecnológicos son beneficiosos de por sí, han dejado que casi todas estas tecnologías prosigan, se usen, vendan, estén diseminándose en el ambiente y en nuestros cuerpos, sin siquiera mínimas evaluaciones de sus posibles impactos negativos y sin regulaciones, mucho menos aplicación del principio precautorio. Un ejemplo claro es la industria nanotecnológica, que con más de 2000 líneas de productos en los mercados, muchos presentes en nuestra vida cotidiana (alimentos, cosméticos, productos de higiene, farmacéuticos), no está regulada en ninguna parte del mundo, pese a que aumentan los estudios científicos que muestran toxicidad en ambiente y salud, especialmente para los trabajadores expuestos en la producción y uso de materiales con nanopartículas.

Pero el Foro de Davos sí elabora anualmente un amplio informe sobre riesgos globales, porque esos riesgos afectan sus capitales e inversiones. En la edición 2015 afirman que “El establecimiento de nuevas capacidades fundamentales que está ocurriendo, por ejemplo, con la biología sintética y la inteligencia artificial, está particularmente asociado con riesgos que no se pueden evaluar completamente en laboratorio. Una vez que el genio haya salido de la botella, existe la posibilidad de que se hagan aplicaciones indeseadas o se produzcan efectos que no se podían anticipar al momento de su invención. Algunos de esos riesgos puedes ser existenciales, es decir, poner en peligro el futuro de la vida humana”. A confesión de partes, relevo de pruebas. Pero aunque lo reconozcan, no tomarán ninguna medida que coarte sus ganancias.

En este contexto, desde hace algunos años, estamos trabajando junto a otras organizaciones, movimientos sociales y asociaciones de científicos críticos, en la construcción de una red de evaluación social y acción sobre tecnologías (Red TECLA), para buscar por un lado informarnos y comprender el horizonte tecnológico, sus conexiones, impactos e implicaciones desde muchas perspectivas (ambiente, salud, ciencia, género, trabajo, consumo) y fortalecernos para actuar sobre ellas.

Para avanzar en estas ideas y en el cuestionamiento de la tecnociencia al servicio del lucro, con experiencias concretas desde varios países latinoamericanos, se realizará el seminario internacional “Ciencia, tecnología y poder: miradas críticas”, el 8 de noviembre, de 9.30 a 14 horas, en la Hemeroteca Nacional, Ciudad Universitaria, México, convocado por la Red TECLA, la Unión de Científicos Comprometidos con la Sociedad y el Grupo ETC (http://www.etcgroup.org/es). Tenemos que apropiarnos, desde abajo, de la consideración y acción sobre estos temas.

31 de octubre de 2016

¿ES NECESARIO PREGUNTAR?

Iroel Sánchez. lapupilainsomne.wordpress.com

Junge Welt es un diario alemán que como todas las propiedades colectivas en la antigua República Democrática Alemana fue subastado después de la absorción de esta por Alemania occidental y vendido por menos de un dólar a un empresario que lo llevó a la quiebra. Un grupo de periodistas, con el apoyo de miles de lectores, logró hacerlo reflotar y convertirlo en un pequeño diario que sobrevive a duras penas en un entorno hostil.

No hay información acerca de que Junge Welt reciba dinero desde países como Rusia, con una relación conflictiva con Alemania, ni que aliados del gobierno ruso entrenen fuera de territorio alemán a periodistas de Junge Welt, o que sus redactores se fotografíen en las inmediaciones de instalaciones militares donde radican más de 70 000 soldados norteamericanos en suelo germano, ni de que hayan sido atacados con perros por las autoridades, como acaba de ocurrir con la periodista estadounidense Amy Goodman, bajo la acusación de invadir propiedad privada en Dakota del Norte para protestar por la construcción de un oleoducto que daña el medio ambiente.

Sin embargo, en Junge Welt explican que cada doce meses son colocados por el servicio secreto del Estado germano en una lista de “organizaciones extremistas”, algo que disuade a anunciantes y suscriptores que son la principal fuente de sus ingresos y justifica acciones como la intersección de las comunicaciones de sus trabajadores. En lo que va de 2016 en Junge Welt han tenido que enfrentar diez demandas en los tribunales, lo que los ha obligado a destinar a su defensa importantes recursos financieros de sus ya menguadas arcas. En una ocasión la sede del periódico fue allanada por agentes armados del servicio secreto en busca del original de un documento publicado por el periódico bajo el pretexto de utilizarlo en un proceso de instrucción policial.

Aun así, en un país de más de 80 millones de habitantes, que es la mayor economía de Europa, Junge Welt ha encontrado lo que en países pobres o con menos población es económicamente inviable: un pequeñísimo nicho que le permite sobrevivir, aunque sea siempre amenazado por la quiebra. Por eso es mostrado a aprendices de la libertad de expresión, entendida como libertad de empresa, como prueba de pluralismo. El hecho de que no existan periódicos como Junge Welt en la inmensa mayoría del mundo capitalista, ya sea en España, Guatemala o Paraguay, ¿no les dice nada?

Pero lo cierto es que no ha sido suficiente dejar que la mano invisible del mercado coloque a lo alternativo en lo que es su destino manifiesto en el capitalismo, no hay que esperar otra cosa para una publicación que no tiene amigos entre banqueros o grandes empresarios que la marginación. Y como prueban los hechos, el aparato represivo del Estado capitalista debe mantener la alternatividad en niveles lo suficientemente bajos para garantizar su inocuidad en un maregmanum mediático local y global que reproduce por las más diversas vías la ideología hegemónica en sinergia con la dominación militar, política y cultural de su principal exponente: Estados Unidos.

¿Es necesario preguntarse cómo sería la actuación de ese gobierno si fuese el de una nación pobre, pequeña y bloqueada, y Junge Welt formara parte de un sistema de prensa entrenado y financiado desde el exterior, con un presupuesto superior al de todos los demás medios de comunicación del país juntos?

NOTA DE EDITOR DE ESTE BLOG:
Este artículo bien podría ser el causante de la cuenta de Iroel Sánchez en facebook, que él mismo denuncia en una breve entrada en su blog que reproduzco a continuación:

¿QUÉ PASA, FACEBOOK?

Acabo de intentar entrar a mi cuenta de Facebook y se me comunica se ha inhabilitado y se me ha enviado a un enlace que dice lo siguiente:

¿Por qué se ha inhabilitado mi cuenta?
Hemos inhabilitado tu cuenta porque infringía las Condiciones de Facebook.
Nuestras políticas:
  • Tu cuenta debe tener tu nombre real.
  • Las cuentas personales solo deben representar a personas. Utilizar un perfil personal para representar a algo o alguien que no seas tú mismo (por ejemplo, famosos, mascotas, ideas, objetos inanimados, etc.) supone una infracción de nuestras normas.
  • No está permitido hacerse pasar por nada ni por nadie.
  • Mantener varias cuentas va en contra de nuestras políticas.
  • Está estrictamente prohibido crear cuentas con el fin de enviar correo no deseado o acosar a otras personas.”

Pero lo ahí descrito no se ajusta al estado de mi cuenta pues me identifico en ella con mi nombre “Iroel Sánchez” . Le he solicitado a amigos vean mi cuenta que contaba con casi 4000 seguidores y me dicen no existe, no quiero acusar a nadie pero es muy raro que suceda después de compartir en esa red los dos últimos posts de mi blog “¿Es necesario preguntar?” y “Macartismo del Siglo XXI“ y de las polémicas que alrededor de los medios de comunicación y de la internet he sostenido en esa red social, espero sea un equívoco y pido a quienes siguen el perfil de este blog allí ayuden a divulgar este hecho.
------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Quienes no una sino varias veces hemos sufrido la censura y eliminación de nuestros perfiles en facebook sabemos bien qué patraña representa eso de “la democracia digital” para facebook y otras “redes sociales”. Escriba lo que escriba, Iroel Sánchez comete dos terribles faltas para los depositarios de los monopolios de la “libertad de expresión” burguesa, ser comunista y cubano. Y si a eso le sumamos que se opone a la “transición de su país al capitalismo”, ya tenemos las “razones” de su expulsión fuera de dicha “red social”.¡REPOSICIÓN INMEDIATA DE LA CUENTA DE IROEL SÁNCHEZ YA!